Si para Mike, fanfarrón y temerario, no se puede llevar a cabo una investigación sin romper huevos, Marcus quiere más tranquilidad. No soporta que su amigo de la infancia perturbe su vida familiar. La violencia de Mike corroe su relación y empuja a Marcus a la terapia. Al mismo tiempo, durante una peligrosa persecución, los dos policías descubren que Syd, la guapa hermana de Marcus, está en una misión para la D.E.A. Ella ha guardado el secreto para no poner en peligro cinco meses de trabajo encubierto durante los cuales transformó el pequeño corte del ruso Alexei en un gran corte para el cubano Johnny Tapia.